Si suspirara el pómulo, quizá pueda hablar con la córnea y le podría narrar el solitario hecho de aceptar el destino, lo bello que puede ser ver desde otra óptica, la vida; ver en lo más oscuro del alma, caminar tanteando -pero seguro a la vez- saber dónde estás yendo; dónde se colocada cada parte de tu faz; sentir cada color de las cosas, sin necesidad de reconocerlas. Si todo o todos vieran la dinámica sabrían que son más que personas sin una facultad, serían reconocidos y aceptados en ésta sociedad, sin dudar.
Harry Cañari Atoche
1 comentario:
Tío estuve leyendo tu comentario en el útero de marita, y ahora veo tu blogs, tío un consejo si no sabes y ni siquiera haces política mejor no opines, dedícate a lo tuyo que es el arte. Aunque todos tienes el derecho a opinar no, pero mmmmmmmmmmm, mejor opina de arte. Que esta muy bueno tu blogs de ARTE. mira q me he tomado la molestia de escribir eh. saludos
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